El Real Betis sufrió muchísimo en un nuevo mal partido
Con un Real Betis inmerso en una racha pésima de juego y resultados, llegaba una nueva oportunidad ante un nuevo rival, a priori, inferior. En esta ocasión, el enfrentamiento en Barcelona frente a la UE Sant Andreu en el Campo Municipal Narcís Sala se ha saldado con un 1-3, que hace que, los hoy visitantes, tengan un pequeño respiro en el mal momento que están viviendo.
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El partido comenzaba con la novedad de Ricardo Rodríguez en la posición de pivote defensivo. En los primeros compases del encuentro no ocurrió gran cosa, hasta que llegó la primera gran oportunidad para el Betis tras un error en la salida de balón del conjunto local que dejaba a Bakambu en un buen lugar aunque el disparo se marchó fuera. Pocos minutos después llegó una falta peligrosa a favor de los de Pellegrini que Chimy Ávila se encargó de transformar para poner el 0-1 en el marcador, además de dirigirse a la afición verdiblanca desplazada pidiendo perdón.
Tras no ser superior en ningún momento al rival a pesar de ponerse por delante en el encuentro, llegó el gol del empate por parte del Sant Andreu en una jugada donde, tras perder las espaldas y las marcas en varias ocasiones, Sergi Serrano remató a placer para hacer el 1-1. A continuación el partido volvió a como estaba en un inicio donde ningún equipo fue capaz de crear juego y elaborar un buen fútbol.
Con esto finalizó la primera parte donde lo más destacable fueron los dos goles y donde hubo más bien poco ritmo y pocas ocasiones por parte de ambos equipos. El Real Betis llegó al descanso con aún más presión y manteniendo la mala imagen que traía partidos atrás.
Sonrió la suerte
El segundo tiempo comenzó aún con peores noticias para el conjunto heliopolitano a pesar de las dos sustituciones, ya que el Sant Andreu comenzó a apretar y gozó de dos ocasiones claras de gol, donde un jugador del propio conjunto local sacó el balón en la línea de la meta que hoy defendió Fran Vieites, además de un posible penalti. Tras este comienzo de segundo tiempo sin resultados, Manuel Pellegrini agotó los cambios con media hora de partido aún por delante.
Después de las llegadas locales, el Real Betis con jugadores frescos gozó de alguna ocasión clara y se encontró con un penalti, algo dudoso, provocado por Vítor Roque. El brasileño pidió el balón y tras un pésimo lanzamiento al centro de la portería que el portero paró, Bartra cogió el rechace y transformó el 1-2, a pesar de que con VAR no habría sumado al marcador ya que estaba completamente dentro del área. Con el resultado a favor el Real Betis aguantó la posesión y dejó correr el tiempo hasta que en un robo y un pase de Mateo Flores que dejó a Abde solo, remató a placer para poner el definitivo 1-3.
El cuadro bético, a pesar de un nuevo mal partido, consiguió pasar de ronda en la competición copera con alguna polémica y sobre todo con un mal sabor de boca debido a una nueva imagen pobre del equipo en esta temporada.
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