EL CÁDIZ CERTIFICA LA PERMANENCIA CON UNA IDIGNA VICTORIA POR 2-1 ANTE LA UD ALMERÍA

El partido entre el Cádiz y el Almería, correspondiente a la 39ª jornada de LaLiga Hypermotion, se disputó hoy en el Estadio Nuevo Mirandilla. El encuentro finalizó con una victoria para los gaditanos por 2-1, un resultado que les asegura la permanencia en la categoría.

Desde el primer minuto, el Cádiz salió enchufado, volcando el juego sobre el área del Almería. Sin embargo, la presión no se tradujo en ocasiones claras y Fernando Martínez vivió un primer tramo relativamente tranquilo. Pese a que los amarillos no estaban haciendo un buen fútbol estaban llegando con mas claridad que los rojiblancos,

Todo cambió en el minuto 30, cuando Roger Martí recibió un pase en profundidad y fue derribado por Kaiky Fernandes, que era el último defensor. El colegiado no dudó y expulsó al central brasileño, dejando al Almería con diez. Lo que parecía un punto de inflexión favorable al Cádiz, se convirtió en todo lo contrario.

Pese a la inferioridad numérica, el Almería se replegó bien y sacó partido de una de sus especialidades: el balón parado. En el minuto 38, Gonzalo Melero aprovechó un saque de esquina y, con un certero remate en el área pequeña, adelantó a los de Rubí. Sorpresa y silencio momentáneo en el Mirandilla.

A partir del gol visitante la inoperancia amarilla fue tremenda. Tras irse perdiendo al descanso por 0-1, En la segunda parte fue mejor el conjunto amarillo pero con finalizaciones ofensivas indignas de un equipo profesional, mientras el Almería se defendía con uñas y dientes y sin dejar de intentar volcarse al ataque a hacer el 0-2 siempre que pudiese.  Garitano movió el banquillo, introdujo piernas frescas y cambió el sistema, pero el gol se resistía. Nuevamente una jugada compleja derivó la expulsión de Bruno Langa para los visitantes tras ver la roja directa por una entrada muy dura sobre Roger, dejando al Almería con nueve.

El Cádiz seguía sin darle sentido a su fútbol. La afición cadista mostraba su enfado con cánticos contra directiva y equipo ante la bochornosa imagen que estaba ofreciendo su equipo.

Las interrupciones, las pérdidas de tiempo y los cambios llevaron el partido a un descuento largo, donde se obró el milagro amarillo.

En el 93′, el Cádiz encontró el premio a su insistencia. Carlos Fernández, que había entrado desde el banquillo, empujó un centro raso desde la izquierda para poner el 1-1. El Nuevo Mirandilla estalló pero con una alegría un tanto irónica.

Cuando el empate parecía ya cerrado, llegó el éxtasis. En la última jugada del partido, un balón colgado por Roger fue rematado por Víctor Chust, que batió por debajo de las piernas a Fernando y mandar de esta manera el balón al fondo de la red. El central firmaba la remontada y sellaba tres puntos vitales que aseguran la permanencia. Tristemente el Cádiz seguirá siendo equipo de segunda división un año más.

Imagen destacada: Cádiz CF