La selección logra igualar su récord histórico de partidos sin perder gracias liderada por un Merino goleador y un gran Pedri
La selección española, tras vencer a Bulgaria en el Estadio José Zorrilla de Valladolid, roza el billete para un Mundial más que ilusionante. El combinado nacional materializará con casi total seguridad su pase al torneo internacional debido a que dispone de tres puntos sobre la selección turca, a quien venció 0-6 en el segundo encuentro que disputó la selección. España dispuso de un plácido partido ante la escuadra dirigida por Alexander Dimitrov. En la primera parte, se estableció un dominio de los locales seguidos por constantes ocasiones de peligro. El primer gol llegó gracias a un cabezazo de Mikel Merino en el minuto 35, que volvió a repetir la misma fórmula para anotar el 2-0 en la segunda mitad. También brilló Pedri sobre el verde, algo que le valió varias ovaciones por parte de la afición. La tercera diana llegó con un gol en propia puerta del central Chernev. España, una vez más, completó un excepcional encuentro con el Mundial a la vuelta de la esquina.
Comenzó la selección española atacando en busca de abrir la lata. No tardó en desplegar su artillería ofensiva tras establecer un monólogo en campo contrario. La primera ocasión la tuvo Samu tras una buena ruptura al espacio de Grimaldo que no llegó a rematar el delantero melillense. Al poco tiempo, Pedri comenzó a carburar y empezar a sentirse protagonista. El centrocampista canario, con la chistera sobre la cabeza, encontró con grades últimos pases a Baena y Samu en posiciones de disparo dentro del área, aunque ambos desperdiciaron las ocasiones. Asimismo, el propio jugador del Barcelona dispuso de la jugada más clara del encuentro hasta el momento tras colarse hasta el corazón del área e intentar una ‘picadita’ que se estrelló contra el larguero. El show de Pedri fue recompensado con una merecida ovación del José Zorrilla.
Apenas le duraba el balón a Bulgaria ante una España muy atenta en los duelos post-pérdida para evitar contrar y seguir llevando la iniciativa. La selección prosiguió con su dominio en busca de un primer gol que se alargó más de la cuenta. Samu, Zubimendi y Oyarzabal intentaron disparos que no lograron besar el fondo de las mallas. No paró de generar peligro el combinado nacional, aunque faltaba mejorar la calidad de los disparos. En este momento, entró en escena la cabeza de Mikel Merino, que ya ha dado más de una alegría al país. El centrocampista navarro aprovechó un pase con la frente de Le Normand para anotar el primer tanto de la noche desde una posición inmejorable.
Con el 1-0 vislumbrado en el electrónico del coliseo vallisoletano, pudo doblar la ventaja un Samu negado hoy de cara a puerta. El guardameta Vutsov protagonizó una liada que desperdició el ariete del Porto en una jugada de gol o gol con el portero rival mal posicionado tras la pifia. La selección española, cómoda con el partido bajo control, bajó una marcha durante los últimos minutos de la primera mitad. En este tramo, pudo dar el susto Bulgaria en una contra de Kirilov. El extremo de la escuadra visitante se disponía a encarar a un Unai Simón que se mostró dubitativo en la salida, aunque apareció Le Normand velozmente para cerrar el paso al delantero contrario.
Tras el intermedio, De la Fuente cambió de ‘nueve’ dando entrada a Borja Iglesias por Samu. El delantero gallego dispuso de dos ocasiones al poco de reanudarse el encuentro, aunque Vutsov detuvo sobre la línea de cal su remate de cabeza y, poco más tarde, el guardameta desvió su disparo desde la frontal. España seguía asediando a Bulgaria, por lo que continuó redactando el mismo guion que en los primeros 45 minutos. No obstante, en este segunda mitad, el gol llegó con mayor prontitud, aunque volvió a tener al mismo protagonista. Mikel Merino, de nuevo, se impuso en el área para aprovechar un centro caramelizado de Grimaldo para doblar la ventaja con un nuevo remate de cabeza. El martillo del futbolista pamplonica, de nuevo en escena.
Tras el segundo tanto del encuentro, el conjunto búlgaro dispuso de una gran ocasión de gol. Despopov se plantó ante Unai Simón tras un gran pase filtrado. La definición, rasa y cruzada, estuvo muy cerca de recortar distancia. A continuación, De la Fuente dio entrada a Yeremy Pino y Aleix García por Baena y Zubimendi. Poco más tarde, introdujo a Barrios en el verde por un Pedri que se llevó una gran ovación del estadio. España se permitió bajar una marcha ante los inofensivos ataques de Bulgaria y el control del partido bajo sus botas más el resultado a favor.
Posteriormente, el seleccionador español se vio obligado a agotar su último cambio debido a una hemorragia en la boca de Le Normand, aunque no pareció nada grave. En su lugar entró Vivian, por lo que la selección se plegó de ‘athleticzales’ en la portería y los centrales. En un partido donde predominaba la tranquilidad, el central Chernev se anotó en propia puerta el tercer gol favorable a España tras una llegada por el flanco izquierdo. En los últimos minutos, con poco en juego por parte de ambas selecciones, la tranquilidad brilló por su presencia hasta el pitido final. Cuando todo parecía que poco más iba a ocurrir, Georgiev cometió un penalti sobre Merino que ejecutó Oyarzabal con éxito para certificar el 4-0 definitivo. España acaricia el pase al Mundial y su imagen permite derrochar ilusión.
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