El conjunto hispalense planea una revolución dentro del plantel, con muchas altas y bajas
El mercado de fichajes ya ha comenzado de forma oficial y los equipos comienzan a darle forma a la plantilla que confeccionarán de cara al siguiente curso. El Sevilla, tras una temporada de lo más irregular, pretende hacer una reforma exhaustiva dentro del equipo, pues, además de la renovación de plantilla que se lleva pidiendo hace unos años, con la llegada de García Pimienta, el estilo de juego cambiará por completo, por lo que los recursos necesarios serán totalmente diferentes a los que hay actualmente.
Tanto es así que los directivos tratarán de contar con jugadores con buen trato de balón, que se ajuste a esas necesidades que requiere el técnico para implantar su característico juego asociativo, o jugadores que el propio entrenador ya conozca. Por tanto, los encargados ya se han puesto manos a la obra y hasta ahora se han oficializado varias operaciones.
Una de las principales tareas que se encomiendan los nervionenses es la de liberar masa salarial, ya que es uno de los motivos de la mala situación económica del club. Es por ello que varios jugadores han salido libres, como son el caso de Sergio Ramos, que no renovó su contrato una vez finalizó el pasado 30 de junio, o el de Erik Lamela y Mariano Díaz por la misma razón, a la que se suma la marcha de Óliver Torres rumbo al Monterrey de México como agente libre.
Aún queda mucho por hacer
Estas salidas tienen un factor común: su elevado salario. Y con ellas, la masa salarial ha bajado en consonancia, si bien es cierto que aún tienen que seguir reduciéndola para poder fichar e inscribir jugadores. No son estas las únicas bajas hasta el momento. A ellas hay que sumarle la venta del canterano Luismi Cruz al Tenerife por un montante de alrededor del medio millón de euros, equipo en el que ha pasado cedido esta última campaña, y también la cesión de Federico Gattoni al River Plate, tras haber pasado la segunda parte de la temporada a préstamo en el Anderlecht belga.
A todas estas bajas quedaría sumarle la de los jugadores que terminan su período de cesión, como es el caso de Alejo Véliz y Hannibal, o nombres como el de Agoumé y Soumaré, los cuales se pretende que sigan otra temporada más, y por ello es que ya se han iniciado conversaciones con los equipos a los cuales pertenecen.
Aún así, parece ser que hay varias salidas previstas pero aún pendientes. Hay varios jugadores en la lista de transferibles, como es el caso de Joan Jordan -del que hace poco salió una información que decía que lucharía por un puesto en el equipo y convencer al nuevo míster-, o Augustinsson o Delaney, por los cuales hay conversaciones con el Anderlecht, equipo en el que han pasado la temporada a préstamo y que pretende quedarse a ambos futbolistas en propiedad. No obstante, la marcha más esperada parece ser la de En-Nesyri, con quien se pretende sacar tajada y sanar las arcas del club. El traspaso del marroquí parece un hecho y hay una gran cantidad de equipos interesados.
Varias llegadas por cerrarse y que ya están al caer
En el apartado de llegadas, tan solo se ha oficializado el fichaje de Chidera Ejuke, procedente del CSKA de Moscú, del que ha llegado libre tras haber pasado como cedido por el Hertha de Berlín y el Antwerp de Bélgica, por lo que el cuadro sevillano se ha hecho con los servicios de un extremo que ya cuenta con experiencia en competiciones europeas.
Aunque la prioridad del conjunto sea la de fichar jugadores contrastados en la élite, no se le quita el ojo a las figuras de talentos emergentes, como es el caso de Peque, jugador del Racing que García Pimienta ya conoce a la perfección de su etapa en las categorías inferiores del FC Barcelona y que se ha destapado como uno de los jugadores más atractivos de La Liga Hypermotion con tan solo 21 años. Ha sido uno de los nombres propios de la competición tras haber anotado 18 goles y repartido 3 asistencias en 40 partidos siendo mediapunta. El joven catalán está a punto de recalar en el Sevilla por 4 millones, su cláusula de rescisión, a la que se han remitido los cántabros, por lo que su llegada es cuestión de días.
Uno de los principales objetivos es reforzar la sala de máquinas, pues con la salida de Soumaré y Agoumé, la posición ha quedado huérfana. Por ello, Ilaix Moriba -del RB Leipzig, a quien el entrenador conoce de su estadía en el Barça- y Sambi Lokonga -perteneciente al Arsenal, de un perfil similar a Soumaré- parece que serán las próximas llegadas en el centro del campo andaluz, ambos cedidos con opción a compra.
En la zona de ataque, que también pretende ser remodelada, han sonado varios nombres, como Ansu Fati o Vitor Roque, pero sin llegar a una conclusión final hasta el momento.
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