Muchas bajas y refuerzos insuficientes resumen el mercado invernal sevillista
El comienzo de la segunda parte de la temporada trae consigo el mercado de fichajes de invierno, en el que, de manera general, no suele haber tanto movimiento, al menos entre las grandes instituciones, si bien es cierto que para los clubes que no están en el primer escalafón de la élite resulta un momento clave de la campaña: se abre una ventana de traspasos para poder reajustar la plantilla.
En el caso del particular del Sevilla FC, los andaluces han mejorado, al menos en sensaciones, respecto al curso anterior, a pesar de que siga siendo insuficiente. Por ello es que el mercado de invierno se presentaba como una oportunidad de oro para terminar de perfeccionar el trabajo que se realizó en verano con la confección del plantel, que aún sigue demandando algún que otro efectivo en ciertas zonas del campo. Y tras 5 bajas y 2 fichajes, el balance es negativo.
Salidas con las que se contaban
En el apartado de bajas no ha habido especial sorpresa, pues los jugadores que han abandonado el equipo son efectivos que no contaban con demasiado protagonismo en el esquema de García Pimienta y con los que se rumoreaba su salida desde hace algún tiempo.
La pérdida más destacada del conjunto hispalense es la del retirado Jesús Navas, que colgó las botas el pasado mes de diciembre, y aunque no haya resultado uno de los futbolistas con más minutos -las lesiones no se lo han permitido-, lo cierto es que dentro del vestuario es una marcha dolorosa, pues se trata del mayor emblema del club, y sus valores y experiencia, dada su dilatada trayectoria, eran vitales para el resto de jugadores.
Montiel, otro lateral derecho, también ha abandonado las filas del conjunto de Nervión. El argentino, tras varios períodos de traspasos coqueteando con una salida definitiva del club, finalmente lo hace rumbo a River Plate, equipo desde el que llegó años atrás por una cantidad mucho mayor que por la que se marcha de vuelta. De este modo, el carril derecho tan solo cuenta con un lateral derecho nato como Carmona, y como respaldo dispondrán de la polivalencia de un Juanlu Sánchez que también sonó con salir del conjunto nervionense.
Pedro Ortiz, otro futbolista relegado al ostracismo, finalmente ha acabado marchándose al Córdoba. No se le encontró acomodo en verano, y para no quedarse sin el alta federativa, se le hizo ficha con el primer equipo, a sabiendas de que no iba a contar con minutos. Y así fue: el mediocentro tan solo ha disputado 47 minutos en 2 partidos jugados, ambos de Copa del Rey ante equipos de muy inferior categoría.

Salen dos refuerzos de verano
Iheanacho y Valentín Barco son las otras dos bajas del Sevilla. Dos fichajes del mercado de verano que no han convencido al entrenador y por ello no han contado con muchos minutos, y desde que comenzó a acercarse el período de invierno empezó a rumorearse con sendas salidas, las cuales se han acabado dando.
El nigeriano aterrizó en Nervión como agente libre procedente del Leicester City. Desde el principio generó dudas, pues un futbolista que venía de ser jugador de rotación de un equipo de segunda inglesa llegaba para suplir a la referencia en ataque del equipo de los últimos años, En-Nesyri. Arribó falto de forma y con un ritmo competitivo nulo. El ariete ha sido protagonista de errores groseros de cara a portería que han costado puntos y como consecuencia, las críticas no tardaron en llegarle. El artillero ha sido constantemente cuestionado durante su corta estancia en el sur de España. Tras una primera mitad de temporada frustrada por lesiones y mal rendimiento, Kelechi ha tenido que volver a Inglaterra de la mano del Middlesbrough tan solo 6 meses después de su llegada.
El argentino, que también llegaba de Inglaterra, lo hacía para tapar el vacío que dejaba Marcos Acuña y disputarle el puesto a un Adrià Pedrosa que la temporada anterior no convenció del todo. Cedido por el Brighton, Valentín Barco tardó poco en debutar, y además lo hizo como titular, y dejando buenas sensaciones, a pesar de fallar en un gol en contra. Desde entonces, poco más se vio de la promesa argentina, que vio cómo incluso Kike Salas, un central reconvertido, le ganaba la partida por entrar en el once, por lo que acabó optando por romper la cesión y marcharse al Estrasburgo.

Muy pocas llegadas para tantas bajas
Tantas marchas, a pesar de no ser especialmente importantes -más allá de la de Jesús Navas-, han acortado en consonancia la plantilla, que ha dejado varias posiciones huérfanas, por lo que reforzarse resultaba una tarea clave. Ante las salidas de Ocampos y Navas, los extremos comenzaban a quedarse cortos en cuanto a cantidad de efectivos se refiere, y debido a la más que probable salida de Barco, la cual se acabó dando, también abría la opción de buscar un lateral izquierdo en este mercado invernal.
Y llegado el ecuador de la ventana de fichajes, llegaría el primer refuerzo: Rubén Vargas. El suizo ha llegado al Sánchez-Pizjuán procedente del Augsburgo como un jugador contrastado en las grandes ligas y conocido por su desempeño en su selección nacional, de modo que la incorporación ha ilusionado a varios de los seguidores.
Una vez conseguido el fichaje del extremo, el foco parecía estar puesto en el lateral, ya que Barco parecía que se enfundaría la camiseta del Porto, pero la operación quedó enquistada por el cese del entrenador del equipo portugués, por lo que, mientras el joven argentino siguiese a las órdenes de García Pimienta, se mirarían otros frentes.
Y en esta parte de la ecuación aparece Akor Adams, que ante la baja de Iheanacho, llegaría al cuadro hispalense procedente del Montpellier. Procedente del colista de Francia y con un bagaje goleador bastante pobre, el fichaje despierta más dudas que certezas entre la afición sevillista.

Otra decisión precaria
En los últimos compases del mercado Barco abandonó el equipo, y la directiva finalmente optó por contar con Kike Salas como lateral de urgencia si el hipotético titular, Pedrosa, causa baja, lo que evidencia la falta de efectivos en la zona. De modo que, nuevamente, la posición del lateral izquierdo queda incompleta.
Así las cosas, concluye un nuevo período de traspasos que no ha hecho más que decepcionar, nuevamente, y aún más si cabe, a la afición, que no ha tardado en expresar su disconformidad con la gestión de las altas esferas de la entidad que no parece responder ante la mala situación deportiva e institucional del club.
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