El Sevilla FC salía en la noche de hoy al estadio Nuevo Mirandilla para enfrentarse al Cádiz CF, que 8 de los 9 puntos que tiene los había conseguido en casa. En torno a 500 aficionados sevillistas se desplazaron a la ciudad gaditana para animar y su equipo y darle ese apoyo que le hiciera lograr los 3 primeros puntos de la era Diego Alonso.
Comenzó el partido entre los dos equipos con un ritmo alto y la prueba está en que el minuto 3 José Mari se llevaba una tarjeta desde el banquillo ya que protestó ostensivamente al colegiado una falta de Ramos a Roger en la que el camero le soltó el brazo al valenciano, aunque el colegiado no advirtió nada punible en esa acción. Lo intentaba el conjunto amarillo en los minutos posteriores pero lo hacía con más ganas que precisión. Aunque en el minuto 8, tras un fallo de Lukebakio que pierde el balón en campo propio y la recuperación de los locales le cae Chris Ramos que absolutamente solo acomoda el cuerpo y bate a Nyland para poner el 1 a 0 para el Cádiz.
Seguía calentándose el partido entre ambos equipos y ya en el minuto 11, Lukebakio encaraba el área local y Darwin Machís se veía obligado a frenar con falta al belga, falta que Iván Alejo no veía correcta y por la protesta al colegiado recibió la segunda tarjeta amarilla de su equipo. Tres minutos después sería Fali quién tras una dura entrada a Ocampos recibió la tercera amonestación de su equipo. El Sevilla no se encontraba en un punto óptimo y dejaba claro que la intensidad del Cádiz era superior a la de los hispalenses, que no estaban sabiendo reaccionar.
Pasados los primeros 20 minutos veríamos un intrascendente Sevilla que jugaba a un ritmo inferior al del Cádiz y que no conseguía proyectar su juego en ocasiones ya que el balón le duraba muy poco en campo contrario. Tan alto era el ritmo cadista que en el minuto 24 llegó la cuarta tarjeta para los de Sergio González, en esta ocasión para el mediocentro Koumé. Dos minutos más tarde Sergio Ramos cabecearía en el área pero su remate lo detendría Ledesma sin problemas, aunque el colegiado a instancias del asistente señalaría fuera de juego.
No estaba siendo la noche del Sevilla y el segundo gol del Cádiz así lo pondría sobre la mesa, pérdida de Sergio Ramos tras enviar un balón demasiado largo a Soumaré, robo de los locales, le llega el balón al venezolano Darwin Machís y segundo gol en contra en el minuto 28, 2 a 0 en tan solo media hora y unas sensaciones muy pobres.
Poéticamente el canterano sevillista buscó enmendar su error y, dos minutos más tarde, lo lograría con un remate en una segunda jugada imparable para Ledesma pero, de nuevo, el colegiado lo anularía por fuera de juego posicional de Lucas Ocampos. Se estaba creciendo un poco el Sevilla y, con una buena llegada de Juanlu, que le pondría un buen centro a Suso, el gaditano mandaría su cabezazo por encima del marco cadista.
Como se suele decir, tanto va el cántaro a la fuente, y eso hicieron los visitantes, centro lateral de Juanlu que Ocampos esperaba ansioso en el punto de penalti para cabecear el envío del canterano superando a Ledesma y logrando recortar distancias, 2 a 1 a favor del Cádiz. Lo seguía intentando el Sevilla y, esta vez, sería Suso quién golpearía muy suave desde la corona del área para que el guardameta local atrapara sin problemas el esférico.
Tras una primera parte muy accidentada y con interrupciones, el cuarto árbitro mostró en el cartelón un añadido de 7 minutos. Justo un minuto después el que, hasta el momento era el mejor jugador del Sevilla, recibía la primera tarjeta amarilla de los hispalenses, hablamos de Soumaré, quién frenó a Chris Ramos antes de que el atacante entrara en el área sevillista. La polémica en el minuto 49, donde Mariano protestó un agarrón de Alcaraz en un saque de esquina donde el delantero no puede rematar bien tras estar siendo sujetado por el mediocentro del Cádiz, aunque el colegiado no señaló nada.
Dos minutos después, y ya sin sorpresa, los locales se llevarían una nueva amarilla, en este caso sería el lateral Lucas Pires, quién recibiría la tarjeta por juego peligroso sobre Ocampos. Final de la primera parte con victoria local por 2 goles a 1 y con una intensidad altísima entre ambos equipos, donde el Cádiz empezó mucho mejor, pero fueron los sevillistas quienes, tras el gol, empezaron a carburar.
Volvían ambos equipos de los vestuarios con los mismos protagonistas en el Sevilla y la salida de Meré y Rubén Sobrino en el Cádiz, por Fali y Darwin Machís respectivamente. La primera de la segunda parte sería para el Sevilla en botas de un Lukebakio que, desde el flanco izquierdo, recibía un gran balón de Ocampos y golpeaba el balón con violencia para que Ledesma se viese obligado a despejar el cuero. En el minuto 52 la tendría el Cádiz con un Chris Ramos que estaba desatado, hasta en tres ocasiones los cadistas atentaron contra la meta sevillista, siendo Roger el último en rematar, aunque Nyland cortó el peligro deteniendo el esférico.
Mientras el Sevilla intentaba empatar, desde el banquillo Diego Alonso buscaba darle más piernas a su equipo y aumentar la verticalidad de los suyos, dando entrada en el 58 a En-Nesyri y Óliver Torres, quienes sustituyeron a un Suso bastante normalito y un Lukebakio que lo intentó pero no tuvo su día. Justo dos minutos después llegaría el premio para un Sevilla que estaba siendo mejor en esta segunda parte, balón de banda de Ocampos, despeje entre Ramos y Meré que le queda a Rakitic en la frontal y, con un golpeo magistral que hace una parábola digna de admirar, superando a Ledesma y poniendo el empate a 2 en el marcador.
Se crecían los visitantes y Mariano probaba un disparo lejano que Ledesma detenía con comodidad. Estaba siendo mejor el Sevilla en la segunda parte y se empezaba a ver un Cádiz mas desorganizado y prudente a la hora de presionar que en el primer tiempo. Para los que lo dudaban, la intensidad seguía muy presente en este choque y, sin sorpresa recibiría Lucas Ocampos la segunda tarjeta amarilla de su equipo tras un codazo del argentino a Rubén Alcaraz.
Tras un buen partido, donde asistió a Ocampos en el primer gol de los hispalenses, Juanlu dejaba su puesto en el minuto 73 para que entrara Jesús Navas al terreno de juego. Al mismo tiempo, Sergio daba entrada al terreno de juego a Escalante, que saldría para sustituir a Kouamé. Lo seguían intentando los visitantes y, en la salida de un corner, Ocampos, que está en estado de gracia, tendría una nueva ocasión de cabeza que desbarató el guardameta del Cádiz.
El arbitro tendría un partido complicado ya que no dejó de sacar tarjetas amarillas en el encuentro, la siguiente fue en el minuto 75 a Rubén Sobrino, por una entrada a destiempo sobre un jugador sevillista. Dos minutos después, el colegiado expulsó a un miembro del banquillo rojiblanco, quién protestaba la entrada ilegal al campo de un jugador cadista que había sido atendido. Parece que en los minutos finales el colegiado quería ser protagonista, ya que en el minuto 78, tras una protestas de Marcos Acuña, el jugador sevillista recibiría otra tarjeta amarilla más.
Más cambios en ambos equipos llegado el minuto 80, entraba Alex Fernández por Iván Alejo en el Cádiz y, por parte del Sevilla, Mariano y Acuña se marchaban para dar entrada a Rafa Mir y Adrià Pedrosa. Buscaría dotar de más pólvora a su equipo el técnico local con la entrada de Sergi Guardiola, que entraría en el minuto 86 por Roger, que se ha vaciado en el partido.
Llegaba el partido al 90 y el añadido que dio el colegiado fue de 6 minutos, donde los dos equipos iban claramente con la reserva y sin muchas fuerzas para ir hacia arriba. Sin que pasara nada especial en el añadido, Cádiz y Sevilla empataron a 2 en un partido disputado donde cada uno tuvo sus opciones a lo largo del partido. La primera victoria de Diego Alonso tendrá que esperar.
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