El Sevilla FC disputará en la noche de hoy un duelo más que importante en el estadio de Son Moix, hogar del RCD Mallorca. Los de Diego Alonso llegan a la cita situados en el puesto quince, con el pobre bagaje de 13 puntos, dos más que su rival en el día de hoy, que ocupa el puesto diecisiete. Tan solo cuatro puntos separan a los hispalenses de los puestos de descenso y, tras dos meses desde que hubo un cambio en el banquillo, la situación es cuanto menos crítica.
Para el partido volverá Marcao, el cuál tendrá muy difícil tener minutos después de haber acumulado ya más lesiones que partidos oficiales con el Sevilla. Entran en la convocatoria también los canteranos Manu Bueno y Darío Benavides, quienes dejaron muy buen sabor de boca ante el Atlético Astorga en Copa del Rey. En el apartado de bajas hay algunas figuras importantes, como Jesús Navas, quién tiene para varias semanas de baja. Se echa en falta de nuevo a Nyland, Badé, Suso o Lamela, además del siempre importante Fernando.
Hoy se definirá si debe o no seguir Diego Alonso como entrenador del conjunto nervionense. Cierto es que la plantilla no acompaña y no hay mucho nivel pues, por mas que individualmente sean buenos, como grupo se ve un equipo sin orden en muchas ocasiones, sin velocidad y con algunos jugadores, especialmente los menos habituales, que no están ni cerca del nivel exigible en una entidad como el Sevilla FC.
Hoy, parafraseando a un ex entrenador del Mallorca como Luís Aragonés, los sevillistas tienen que ganar, ganar y volver a ganar, a menos que quieran seguir coqueteando con la inestabilidad y el peligro de un descenso a los infiernos que, a este paso, se ve cada día más real.
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