Los rojiblancos se mostraron superiores de principio a fin y sumaron tres puntos gracias a dos dobletes de Uzuni y Boyé
El Granada volvió a vencer en Los Cármenes. Tras el arduo arranque liguero, la llegada de Escribá (acumula 10 puntos de 12 posibles) al banquillo ha sentado al equipo como una jarra de agua fresquita en verano. Los nazaríes mostraron una plena superioridad de principio a fin que se vio reflejada en el marcador final. Uzuni y Boyé, protagonistas de las dianas, firmaron un doblete cada uno. Así, la escuadra andaluza acumula tres victorias consecutivas y dormirá en puestos de play-offs.
Primera parte
La primera mitad fue un monólogo pintado de color rojo y blanco. Los nazaríes mostraron una notoria superioridad ante los tinerfeños de principio a fin. Los azotes del Granada fueron constantes. Cerca estuvo Uzuni de rematar un pase de la muerte originado por las botas de Trigueros, mientras que Boyé perdonó una clara ocasión tras una buena contra del conjunto andaluz. El combinado canario, por su parte, mostraba serias dificultades para enlazar varios pases seguidos, mientras que, en el plano ofensivo, apenas enseñaron el colmillo más allá de un par de genialidades protagonizadas por Luismi Cruz.
Al cuarto de hora, Mariño sacó a pasear la manopla ante Enric Gallego, aunque el linier levantó el banderín una vez finalizada la acción. Cuatro minutos más tarde, la escuadra dirigida por Escribá estrenó el electrónico. Apertura a banda izquierda de Villar hacia Pablo Sáenz, que puso un potente centro raso que empujó Uzuni al fondo de la red. Explotó el éxtasis en Los Cármenes. Los rojiblancos continuaron generando peligro de manera frecuente, la mayoría de ellas finalizadas por el propio ariete albanés. En el 34, Uzuni dobló la ventaja tras un gravísimo error de la zaga canaria. Boyé asistió al goleador nazarí, infalible en la tarde-noche de hoy.
Asimismo, un brillante Gonzalo Villar hizo de director de orquesta en el centro del campo (un día más). Corbeanu, por su parte, desbordó constantemente por banda derecha, aunque se mostró demasiado errático a la hora de centrar. En el aspecto defensivo, el orden del equipo no quebró en ningún momento. En este sentido, destacaron las actuaciones de Loïc Williams, Miguel Rubio y Mariño. Sendos futbolistas echaron el cerrojo atrás y ocultaron el brillo de la llave.
Segunda parte
Prosiguió el mismo guion durante la totalidad de la segunda parte. El Granada se apoderó de la situación y apenas concedió un ápice de fe al Tenerife. Estuvo muy cerca de aprovechar Pablo Sáenz una segunda jugada para anotar el tercero tras otra gran acción de Corbeanu. Los nazaríes siguieron controlando el encuentro ante el disfrute de la grada. Un nuevo error garrafal del Tenerife propició un dos contra uno favorable a los locales, aunque Salvi le negó el tanto a Pablo Sáenz.
Uzuni, esta vez a través de un desmarque a la espalda de la defensa, dispuso de una oportunidad de oro para completar el hat-trick. No obstante, León corrigió a tiempo y le negó el disparo al albanés, que pareció buscar el penalti. Con el encuentro prácticamente resuelto, Boyé limpió las telarañas de la escuadra para colocar el 3-0 en el marcador. En el descuento, el propio ariete argentino aprovechó un balón suelto dentro del área tras un saque de esquina para firmar su doblete y el 4-0 definitivo. Sin sorpresas en la recta final de partido, el colegiado González Esteban decretó la conclusión del duelo ante la sonrisa de Los Cármenes.
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