Las buenas sensaciones que ha gestado la UD Almería durante los últimos encuentros ligueros deben de plasmarse durante el encuentro de mañana ante la UD Barbastro en el duelo perteneciente a la segunda ronda de la Copa del Rey. Es el torneo del KO por algo, y los andaluces deben ganar, reforzar su imagen en pleno proceso de solidificación de una plantilla más que preparada para sacar este tipo de encuentros y hacer valer la diferencia de categorías que los separan del conjunto oscense.
Si bien el equipo supo sufrir las acometidas del CD Talavera en la primera ronda y en plena crisis, los rojiblancos deben hacer lucir su proyecto de solidez defensiva confeccionado ante el Real Betis y recuperar la pegada de sus futbolistas menos habituales para resolver el encuentro que se disputará en la matinal de mañana miércoles (12:00h) en el Estadio Municipal de Barbastro ante un Segunda RFEF.
La plantilla llegará al duelo con tres bajas confirmadas. Gonzalo Melero, que se retiró lesionado con una contractura del duelo ante el conjunto bético; Embarba, con un esguince de tobillo y César Montes por la doble amonestación que vio en Talavera. En su lugar entran Marcos Peña y Rachad, que hizo su debut el pasado domingo.
Garitano hará cambios y se prevé que regresen al once futbolistas que participan poco, como es el caso de Kaiky Fernandes, Arnau Puigmal, Álex Centelles o Lázaro, quienes apenas cuentan con minutos en liga. La principal duda se traslada a la portería. Gaizka debe decidir si continúa dando minutos a un Maximiano que ha ganado en confianza, o si apuesta por Fernando Martínez o Diego Mariño para mantener la competencia bajo palos.
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