Siguen las malas noticias para la UD Almería. La última llega en forma de lesión, provocada por el ‘Virus FIFA’. Ibrahima Koné se fracturó su tobillo derecho en el encuentro amistoso disputado el pasado viernes con su selección y se perderá, previsiblemente, lo que queda de año. De esta forma, el club se queda sin sus dos delanteros y deberá recurrir al filial para completar la lista de referencias en los próximos partidos.
Corría la primera media hora del partido amistoso entre Mali y Uganda, cuando el ex delantero del Lorient tuvo que ser trasladado en ambulancia hacia el hospital, donde se le realizaron las pertinentes pruebas médicas. El resultado, comunicado por la propia Federación de Mali confirmó los peores presagios. Koné sufre una fractura en su tobillo derecho. En el mensaje también aparece una imagen de Koné en el hospital con gesto de optimismo.
Tras un acuerdo entre la federación y la entidad rojiblanca, Koné puso rumbo de vuelta a Almería para someterse a un diagnóstico concreto y decidir el tratamiento de recuperación, pero previsiblemente el jugador será intervenido en los próximos días y estará de baja durante varios meses.
Sin Suárez ni Koné
Con la baja de Koné, el equipo se queda sin efectivos del primer equipo que ocupen la posición de delantero centro tras la lesión de Suárez, que se encuentra en pleno proceso de recuperación. Todo apunta a que Marciano Sanka ejercerá como referencia durante las próximas jornadas. El guineano, que ya debutó con el primer equipo en el Nuevo San Mamés, se encuentra ante la oportunidad de demostrarle a Garitano que el equipo no necesita refuerzos y que es un recambio de garantías en el aspecto goleador. Por su parte, el otro delantero de la cantera, Marezi, ya entrena con el grupo, convirtiéndose en otra alternativa a la titularidad en Montilivi.
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