Las opciones en ataque pasan por el filial

No son buenos tiempos para la UD Almería, ni en el césped ni con el estado físico de sus futbolistas. Hasta cuatro pilares imprescindibles se encuentran en la enfermería y Garitano tiene que tomar decisiones importantes para confeccionar un once competitivo que permita sacar un resultado positivo del encuentro en Girona.

Esos pilares no son otros que Marc Pubill, Luis Suárez, Ibrahima Koné y Lucas Robertone, aunque el argentino continúa recuperándose de las molestias que arrastra desde el partido ante el Valencia. Koné se ha añadido en los últimos días a la lista de bajas y, probablemente, sea el último en reincorporarse al grupo. Se espera que el periodo de baja del maliense circule en torno a los cinco meses de baja por su fractura de tobillo, por lo que podrá empezar a recuperar sensaciones en el último tercio de competición.

Todas las mencionadas bajas precisan de recambios de garantía. En el caso de la delantera es más complejo, puesto que los dos arietes acaban de iniciar sus respectivos procesos de recuperación. Aunque jugadores de perfil ofensivo del primer equipo podrían hacer de ‘9’, serán varios los encuentros en los que la entidad deba afrontar con las nuevas condiciones. Leo Baptistao y Lázaro Vinicius son dos piezas prácticamente inéditas en lo que va de liga. El ex del Espanyol ya ha ocupado la posición de referencia en otros clubes, mientras que Lázaro explicó en su última rueda de prensa que se también se sentía cómodo jugando como delantero.

La puerta de la delantera también se abre para los delanteros del filial. Dos nombres trabajan a las órdenes de Garitano: Marezi y Marciano. El primero ha regresado a los terrenos de juego de la mejor manera posible y anotó gol durante la pasada jornada con Garitano en las gradas. Mientras que Marciano declinó su compromiso internacional para quedarse a entrenar con el nuevo técnico.